Tenía que ser, pero no fue. Y si esto pasó fue porque la confusión de Ever Ready predominó por sobre el orden táctico de un inteligente Velense, que apoyado en un trabajo colectivo sobrio y algunas sólidas producciones individuales, se llevó lo que mínimamente vino a buscar: un empate 1 a 1 que lo puso en la próxima instancia del Torneo del Interior.
Pudo haber ganado el partido el conjunto blanquinegro, pero el travesaño salvó la valla de Sieracki en dos oportunidades y en una misma jugada. Pero eso recién ocurrió en el último instante del juego, cuando los de Cellillo con mucho ímpetu y pocas ideas acorralaron a un Velense que a esa altura esperaba de contra manejando un empate que ya lo instalaba en otra fase.
Todo ese tiempo que había transcurrido desde que comenzó el segundo período, había pasado por el protagonismo del elenco local, que aunque tenía controlado el campo y la pelota carecía de inteligencia a la hora de ejecutar la definición. Jamás pudo inquietar al arquero visitante, al menos hasta allí. Pero el reloj le jugó en contra a Ever Ready, repitiendo esa falencia que lo hizo volver con una derrota la semana pasada desde Tandil.
Sabiendo que la presión la tenía el blanquinegro, Velense comenzó jugando con tranquilidad, rotando el balón y haciéndolo suyo con el andar siempre parejo de Venanzi –el mejor jugador de la cancha- y un inspirado Ribas que adicionalmente jugó muy suelto. Como había ocurrido en Tandil, los de Cellillo tardaron en acomodarse en el medio y eso agrandó a la visita.
Justo cuando estaba por cumplirse la primera media de partido, Velense llegó al gol con bastante fortuna. Arnaiz remató desde afuera del área y tras un rebote en un defensor la pelota le quedó a Bonarrigo, que por derecha sentenció a Ranieri. Fue un baldazo de agua fría, porque aunque había insinuado, Velense no era merecedor de la victoria a esa altura.
Abusando de pelotazos cruzados y yendo casi siempre por el medio, Ever Ready se topó con la igualdad enseguida. En una de esas tantas pelotas que lanzó, Saracho se llevó puesto a Icarde y el árbitro Martínez cobró penal. Fue Daniel Casco y empató. Pero ni siquiera esa pudo desperezar al local, que extrañaba horrores la manija del desaparecido Márquez.
Con mucha más actitud salió Ever Ready en el segundo tiempo. El DT optó por los mismos once pero enseguida mandó a Mirasola por Icarde y luego a Alday por el confuso Parodi. Hubo más tránsito y un Velense que del otro lado esperaba porque físicamente algunos ya no aguantaban, y porque hasta allí le alcanzaba con el 1 a 1.
Pero faltó sorpresa, decisión y determinación para definir, por más que en la cancha había un equipo muy ofensivo. Recién al final Ever Ready pareció pegar el grito, pero el travesaño no quiso ni siquiera una definició por penales. Primero le negó el gol a Mirasola y enseguida a Hidalgo. Tenía que ser, pero no fue. Pasó Velense, que fue más inteligente, que tuvo mejores individualidades y que pegó cuando tenía que pegar.
SINTESIS
EVER READY: Ranieri; Casco (C); Vincenti, Moltoni; Hidalgo, Silvio D´Angelo, Sepero, Icarde; Márquez; Estévez y Parodi. DT: Jorge Cellillo.
Cambios: en el PT, 28’, Minasso por Sepero; en el ST, 19’, Mirasola por Icarde y 25’, Alday por Parodi.
Suplentes: Fernando D’Angelo y Pilaría.
VELENSE: Sieracki; Trama; Lunghi, Ezequiel Saracho; Sánchez, Chiufo, Venanzi (C), Arnaiz; Ribas; Bonarrigo y Leguizamón. DT: Rubén Pose.
Cambios: todos en el ST; 16’, Funes por Leguizamón; 25’, Casalla por Chiufo y 45’, Rezola por Ribas.
Suplentes: Calvo y Enzo Saracho.
ARBITRO: Claudio Martínez (Gral. Madariaga, bien).
GOLES: 29’ PT, Bonarrigo (V) y 32’ PT, Casco (ER), de penal.
AMONESTADOS: Vincenti, S. D’Angelo, Moltoni, Sieracki, Saracho, Arnaiz y Bonarrigo.
INCIDENCIAS: no hubo.
Pudo haber ganado el partido el conjunto blanquinegro, pero el travesaño salvó la valla de Sieracki en dos oportunidades y en una misma jugada. Pero eso recién ocurrió en el último instante del juego, cuando los de Cellillo con mucho ímpetu y pocas ideas acorralaron a un Velense que a esa altura esperaba de contra manejando un empate que ya lo instalaba en otra fase.
Todo ese tiempo que había transcurrido desde que comenzó el segundo período, había pasado por el protagonismo del elenco local, que aunque tenía controlado el campo y la pelota carecía de inteligencia a la hora de ejecutar la definición. Jamás pudo inquietar al arquero visitante, al menos hasta allí. Pero el reloj le jugó en contra a Ever Ready, repitiendo esa falencia que lo hizo volver con una derrota la semana pasada desde Tandil.
Sabiendo que la presión la tenía el blanquinegro, Velense comenzó jugando con tranquilidad, rotando el balón y haciéndolo suyo con el andar siempre parejo de Venanzi –el mejor jugador de la cancha- y un inspirado Ribas que adicionalmente jugó muy suelto. Como había ocurrido en Tandil, los de Cellillo tardaron en acomodarse en el medio y eso agrandó a la visita.
Justo cuando estaba por cumplirse la primera media de partido, Velense llegó al gol con bastante fortuna. Arnaiz remató desde afuera del área y tras un rebote en un defensor la pelota le quedó a Bonarrigo, que por derecha sentenció a Ranieri. Fue un baldazo de agua fría, porque aunque había insinuado, Velense no era merecedor de la victoria a esa altura.
Abusando de pelotazos cruzados y yendo casi siempre por el medio, Ever Ready se topó con la igualdad enseguida. En una de esas tantas pelotas que lanzó, Saracho se llevó puesto a Icarde y el árbitro Martínez cobró penal. Fue Daniel Casco y empató. Pero ni siquiera esa pudo desperezar al local, que extrañaba horrores la manija del desaparecido Márquez.
Con mucha más actitud salió Ever Ready en el segundo tiempo. El DT optó por los mismos once pero enseguida mandó a Mirasola por Icarde y luego a Alday por el confuso Parodi. Hubo más tránsito y un Velense que del otro lado esperaba porque físicamente algunos ya no aguantaban, y porque hasta allí le alcanzaba con el 1 a 1.
Pero faltó sorpresa, decisión y determinación para definir, por más que en la cancha había un equipo muy ofensivo. Recién al final Ever Ready pareció pegar el grito, pero el travesaño no quiso ni siquiera una definició por penales. Primero le negó el gol a Mirasola y enseguida a Hidalgo. Tenía que ser, pero no fue. Pasó Velense, que fue más inteligente, que tuvo mejores individualidades y que pegó cuando tenía que pegar.
SINTESIS
EVER READY: Ranieri; Casco (C); Vincenti, Moltoni; Hidalgo, Silvio D´Angelo, Sepero, Icarde; Márquez; Estévez y Parodi. DT: Jorge Cellillo.
Cambios: en el PT, 28’, Minasso por Sepero; en el ST, 19’, Mirasola por Icarde y 25’, Alday por Parodi.
Suplentes: Fernando D’Angelo y Pilaría.
VELENSE: Sieracki; Trama; Lunghi, Ezequiel Saracho; Sánchez, Chiufo, Venanzi (C), Arnaiz; Ribas; Bonarrigo y Leguizamón. DT: Rubén Pose.
Cambios: todos en el ST; 16’, Funes por Leguizamón; 25’, Casalla por Chiufo y 45’, Rezola por Ribas.
Suplentes: Calvo y Enzo Saracho.
ARBITRO: Claudio Martínez (Gral. Madariaga, bien).
GOLES: 29’ PT, Bonarrigo (V) y 32’ PT, Casco (ER), de penal.
AMONESTADOS: Vincenti, S. D’Angelo, Moltoni, Sieracki, Saracho, Arnaiz y Bonarrigo.
INCIDENCIAS: no hubo.
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